Windous 95

Siguiendo una petición que se nos hizo a través del blog, pasamos a un cuarteto cuya trayectoria, pese a no ser muy extensa, le sirvió para hacerse un hueco en la memoria de los aficionados, ganando además dos primeros premios tras sólo cuatro participaciones en el Falla. Hablamos del Cuarteto de Rota y una de sus obras más recordadas: Windous 95. Con ella consiguieron un primer premio en el año 1996, desde el cual, no han vuelto a pisar las tablas del teatro.

Imaginemos que estamos en la noche de la final: acaba de actuar la comparsa de Antonio Martín-Los Quijotes del Sur- y nos disponemos a presenciar al cuarteto roteño, quienes no acudían al Falla desde hacía 8 años con “Me borras de Africa” (semifinalista). El público les espera con aplausos, pues pretenden disfrutar de su actuación como ya lo hicieron años anteriores con ¿Por quién puñetas doblan las campanas? o El cuarteto siempre llama dos veces.

Se abre el telón y dos individuos vestidos con calzas y botas, sombrero y capa, aparecen borrachos, dando tumbos por el escenario hasta que llegan al palco de las ninfas, donde está Doña Inés- “¡Como te hagan diosa, me hago ateo!”-.Se trata de D.Juan Tenorio y Chiuti. De repente aparece Luís Mejías, con quien empiezan a interactuar, arrancando las carcajadas del respetable. Hablan de una apuesta que hicieron, a ver quien ha estado con más mujeres… Buena presentación, con un lenguaje muy cuidado y al tipo.

Con esa lista siguen la parodia: “cuando el corpiño le bajaba…se lastimó con la faja”. La modelo Cindy Crawford le pidió que “le dedicara una letrilla”… y Tenorio le contestó que “le iba a dedicá un mojón!”- pero como no entendía el español, se creyó que era un poema-. Está hasta la prometida de Mejías en la lista…

En los cuplés destaca más la representación que la letra, donde llegan hasta a matar a un componente. Estribillo muy aplaudido: Me han "echao" del trabajo, mi novia está "embarazá",ando un poco "resfriao"... ¡Atchis!, y va a gobernar Aznar: ¡Que "peazo" Carnaval!

El tema libre es, sin duda, lo mejor de la actuación. Una sucesión de cuartetas, todo cantado, de temas variados con un sinfín de golpes de humor. Se quejan del nombre de la alcaldesa, que no rima con ninguna canción, el hijo del ganadero que quiere ser mariquita, las ninfas, la base de Rota… Fantástico de principio a fin.

Da gusto rememorar al cuarteto roteño, no obstante la calidad de cada uno de sus pases sirvió para engrandecer la modalidad, que no pasaba por sus mejores momentos. Desde entonces no los hemos vuelto a ver, quizá algún año vuelvan para darnos una sorpresa.